Avelina denuncia con argumentos de lo más convincentes la
superficialidad de los nuevos recursos del arte contemporáneo, como la performance, el videoarte y la instalación, que acusa de ser simples medios de
enriquecimiento de cualquiera que, sin formación, talento o sensibilidad
artística alguna, sepa manejar los resortes de un mercado del arte enloquecido,
contando además con la connivencia de la propia Academia (todas las instituciones
de la cultura, especialmente la Universidad y el Museo).
Aunque pueda haber
críticas puntuales que no compartamos, no se puede negar la necesidad de personalidades
como ella que, desde el saber y la formación experta, mantengan una posición
crítica e independiente respecto a una actividad cada vez más ajena al sentido
común y, sobre todo, abusiva e injusta con el público general de los museos.
- Avelina y los grafiteros
- Antonio García Villarán es otro experto (Doctor en Bellas Artes) capaz de cuestionar la valía de un Miró!